lunes, 5 de octubre de 2009

ONCE MINUTOS + UNOS SEGUNDOS MAS….

Cuando leí esta gran obra de Paulo Coelho quede impresionado con la narrativa, la historia de Maria, una joven que estaba dispuesta a todo por cumplir sus sueños, y fue capaz de muchas cosas….

Habla temas tan diversos y contradictorios como el amor y la prostitucion, los placeres de la carne y el corazón, una obra mágica como solo el gran Maestro Coelho lo puede escribir.

Hoy mientras conversaba con alguien y recordamos a Maria, entendía como los sentimientos nos pueden llevar a hacer cosas que en algún momento juramos que no las haríamos nunca, Maria en su infancia o al inicio de su juventud seguro no imagino que su vida estaría en Europa viviendo las experiencias que deja el placer de la carne.

Recordaba cuando alguien narraba una historia, una mujer que entrego su cuerpo a alguien por agradecimiento, sin importar que su cuerpo no solo le pertenecía a ella, lo entregó sin importar de lo que esto significaba…… mientras ella contaba las lagrimas salían de sus ojos, la historia era impactante, ver aquella mujer con los ojos llenos de lagrimas tratando de explicar lo que para ella tenia explicación…. hoy ese relato vuelve a mi y recuerdo a Maria y aquella mujer que entregó su cuerpo por agradecimiento, entiendo a Maria, que lo hacia buscando un sueño, nada más que aquello, sin historias de por medio solo debía explicaciones a su cuerpo del cual la única dueña era ella…

Hoy pensaba en aquella mujer que entrega su cuerpo por agradecimiento y no lo entiendo aunque no se si deba entenderlo…. La explicación frívola del agradecimiento es un irrespeto a un cuerpo que no solo era de aquella mujer, pues le pertenecía a alguien más que no era el sujeto que ahora era el agradecido al haber disfrutado del cuerpo de aquella mujer, existía un codueño de las caricias, del sudor incesante de los cuerpos al fundirse en uno, existía alguien que seguramente nunca le dijo GRACIAS.

He buscado algo que una las historias de Maria y aquella mujer y no lo he encontrado, la único en común de estas dos mujeres es el disfrute de los cuerpos con un corazón que nunca fue escuchado, con la salvedad que Maria lo tomaba como profesión y aquella mujer es una aprendiz.


JALE

2 comentarios:

Indira dijo...

Una mujer de verdad no entrega su cuerpo y su alma solo por agradecimiento, una mujer de verdad solo es capaz de entregrase al hombre que ama, aquel con el que espera compartir hasta el ultimo dia de su vida.
aquella mujer que dice que se entrego por agradecimiento solo trata de engañarse a si misma y eso es imposible porque al final la verdad siempre se hace presente ya que no se puede tapar el sol con un dedo.

Indira dijo...

No permita que aquellas personas no valen la pena traten de herirlo, ni mucho menos de desviarlo del camino que se trazo, haga caso omiso de palabras que son solo el eco de alguien que esta atormentado por sus propias culpas y trata de hacer desdichado a quien menos lo merece sea feliz, sonria ya que el tiempo en este mundo es corto.