martes, 24 de noviembre de 2009

No hay...

No hay fuerza más fuerte que las de nuestros corazones, enamorados como solo tú y yo lo soñamos.

No hay calor del que dependa más que el de tu cuerpo, cuando somos uno y cuando no también.

No hay receta más efectiva que me alivie que la de tus besos salvos.

No hay calvario más sublime que el de la espera cuando llegas a darme de vos.

No hay amor más puro que este tuyo y mío, que esperamos tanto para encontrarnos en una esquina inesperada, mientras caminábamos sin tenernos sin encontrarnos, este amor tuyo y mío que es más puro que el aire que fluye entre nuestros cuerpos cuando somos uno, más dulce que el néctar fruto de nuestro amor, mas eterno que este mismo amor.

No hay dulzura que disfrute más que la de tus labios míos.

No hay alegría que me divierta más que la de tu sonrisa.

No hay camino más correcto que el que nos encontró en un hoy perfecto.

No hay eclipse más sublime que el tu mirada al decir te amo.

No hay amor más puro que este tuyo y mío, que esperamos tanto para encontrarnos en una esquina inesperada, mientras caminábamos sin tenernos sin encontrarnos, este amor tuyo y mío que es más puro que el aire que fluye entre nuestros cuerpos cuando somos uno, más dulce que el néctar fruto de nuestro amor, mas eterno que este mismo amor.

No hay destino más perfecto que el que fue escrito para encontrar a estos dos enamorados que serán leyenda.