Era una noche de septiembre, la brisa traía un olor particular, la noche no era una más, la luna tenía un brillo diferente, las estrellas no eran las de ayer….
No había escuchado tu voz por algunos soles y otras cuantas lunas, pero era inconfundible, eras vos… hola dijiste, y eso bastó para que esta noche se convierta el lo que fue….
Salimos a un bar, como lo hacíamos antes, sin embargo el espacio aun se interponía entre nosotros, estábamos juntos pero un mar se interponía entre vos y yo…
La noche iba transcurriendo, entre sonrisas y miradas cómplices, las horas pasaban…
De pronto el ruido había parado, las personas habían desaparecidos, en una calle cualquiera estábamos vos y yo… hablando del amor, de tus historias y de la mía, la de siempre, vos….
No podría decir que mi corazón latía a mil como lo hacía antes, pero tampoco me eras indiferente, la sensación de vernos tan cerca era indescriptible…
De pronto te acercaste, y tus labios y los míos se fundieron en un beso apasionado… aquel beso de ayer, aquellos labios que extrañaba, aquellas caricias que mi piel reclamaba, estaban ahí… no las había olvidado, estaban en un rincón esperando por vos y por mi… porque reclamemos lo que nos pertenecía….
Nuestros labios se reclamaban, el beso era eterno, tu mirada de niña, aquella mirada de la cual me enamoré estaba de vuelta… mis manos habían empezado a sudar…. Aquel amor que algún día me hizo el hombre más feliz del mundo estaba frente a mi….
Mi corazón empezaba a ilusionarse una vez más… a pesar del pasado, del presente, del futuro, el corazón empezaba a latir con la fuerza de un corazón que volvía a creer….
La noche iba pasando y nuestros cuerpos se sentían cómodos, sencillamente nos pertenecíamos…. Y de pronto la noche iba muriendo, las estrellan se iban perdiendo en el horizonte….
Y fue en aquel preciso momento, cuando mi corazón latía con más fuerza y tus manos y las mías se habían encontrado, que aquel puñal del pasado regresaba al hoy, aquel puñal volvía a dar en el blanco… tu mirada había dejado de ser la de aquella niña de quien me había enamorado… y tu voz de pronto retumbo…. Discúlpame… esto no puede ser… solo será por esta noche…..
Tan solo cerré mis ojos por unos segundos que fueron eternos, mi cara improvisada estaba ante tus ojos, y lo único que atiné a decirte fue lo entiendo… no pretendía nada más al igual que vos….
Por dentro algo se volvía a romper, aun no sé bien qué… pero algo se volvía a romper… me decías aquellas palabras que ya las había escuchado alguna vez, solo fue una noche ya lo superarás….
Han pasado unas cuantas horas de aquello…. Y estoy aquí escribiendo, porque no me queda más… no te culpo, no te juzgo… hoy soy yo el que me pido disculpas, por entrar en aquel juego que solo vos sabes jugar…. Y aunque el beso y el momento fue sublime…. Nada vale si de por medio está en juego un corazón…
Hasta siempre… y esta vez espero que sea eterno…
JALE
P.D: Me dices que el jarrón se rompió y no se volverá a pegar porque no será el mismo… sabes, el jarrón se puede restaurar y ser más bello que en su inicio… pero de nada servirá si la misma mano que lo rompió lo vuelve a romper una vez más….
Hoy no te juzgaré mas… porque este juego es de dos, tan solo tengo que aprender a decir que no… y hoy aprendí la lección…
